El cambio climático y el impacto medioambiental son una de las mayores preocupaciones de los gobiernos, empresas y ciudadanía, en general. Cada día son más las organizaciones que impulsan acciones para reducir las emisiones contaminantes y convertirse en una empresa neutra en carbono.
Sin embargo, para que los negocios sean más competitivos en materia sostenible y ecológicamente amigables deben asumir este compromiso medioambiental. Para lograrlo deben centrarse en tres aspectos claves: medir las emisiones, reducir el consumo de electricidad y neutralizar los gases contaminantes con uso de energías alternativas.
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La importancia de ser una empresa neutra en carbono
Es evidente que alcanzar la neutralidad climática empieza a ser una de las mayores prioridades en las agendas políticas. Se prevé que el calentamiento global del planeta supere los tres grados a finales de este siglo. Por lo tanto, hay que buscar la manera de reducir las emisiones a cero.
La concentración de C02 ha aumentado en un 40 % desde el inicio de la era preindustrial. Este es el principal gas de efecto invernadero que afecta negativamente al planeta. Por este motivo, plantearse el camino a la neutralidad del carbono para mitigar el cambio climático es de vital importancia. Además, plantearse proyectos forestales o de otra índole se concibe como el primer paso para caminar hacia la sostenibilidad.
Para conseguir este objetivo, el compromiso de la sociedad debe ser colectivo y empezar a cambiar ciertos hábitos en la alimentación o en el uso del transporte. Sin embargo, el papel empresarial también es muy importante, ya que tiene que adoptar políticas que reduzcan la emisión de gases invernadero. Entendiendo como tal el dióxido de carbono, el óxido de nitrógeno, el metano o el ozono, entre otros.
Hay muchas organizaciones que ya han empezado a implementar estos cambios y mantienen un compromiso con el planeta. Sin embargo, para conseguir ser una empresa neutra en carbono se deben establecer una estrategia climática corporativa para lograr los objetivos.
Para empezar, hay que evitar el uso de recursos que provienen del petróleo, fertilizantes, gas natural o procesos industriales, ya que dejan una huella negativa en la atmósfera. Apostar por usar energías alternativas o renovables como la instalación de paneles solares es una opción muy acertada, así como la aerotermia, entre otras.
Pasos para convertirse en una empresa neutra en carbono
Actualmente, podemos observar que las empresas que implementan prácticas ambientales se dividen en tres categorías principalmente.
- Por un lado, tenemos las empresas amigables con el medioambiente que incorporan medidas para cuidarlo.
- Por otra parte, nos encontramos con las empresas responsables que cumplen la normativa y cooperan con esta causa.
- Finalmente, tenemos que diferenciar a las empresas verdes, que consumen productos orgánicos y están muy preocupadas por el impacto del consumidor.
Uno de los principales objetivos es reducir a cero las emisiones contaminantes para el año 2050. Por lo tanto, se espera que haya más negocios amigables y comprometidos que quieran convertirse en empresas neutras en carbono.
Sin embargo, para alinearse con los objetivos de desarrollo sostenible deben seguirse estos pasos que pretenden combatir los efectos del cambio climático.
1. Medir la huella de carbono
Este es el primer paso, y precisamente, la labor más complicada para lograr que una empresa reduzca las emisiones. Aunque, si bien es cierto, la norma ISO UNE-EN ISO 14064 ya no se refiere a los alcances, sino a las emisiones directas e indirectas.
En el primer caso, las emisiones provienen directamente de la empresa, bien a través de las calderas de gas o sus propios vehículos. Mientras que cuando nos referimos a emisiones indirectas, prestamos atención al consumo eléctrico en tiendas, oficinas o naves industriales.
2. Reducir el impacto medioambiental
Cuando se identifican las fuentes contaminantes es más fácil actuar para poder minimizarlas. Por ejemplo, cada vez son más las empresas que deciden instalar paneles solares para implementar medidas de ahorro energético o incorporar vehículos eléctricos para favorecer la movilidad sostenible.
3. La compensación
Este es el último paso, la empresa puede invertir en proyectos que reduzcan las emisiones contaminantes para compensar el CO2 que no se ha podido reducir. ¿Qué acciones se contemplan? Una buena idea es restaurar los bosques, ya que la idea principal es conseguir que el balance sea cero, y de esta manera, lograr la neutralidad.
Teniendo en cuenta estos factores, las empresas deben establecer objetivos cuantitativos a corto, medio y largo plazo con el único propósito de neutralizar las emisiones. Es evidente que plantear una hoja de ruta para la descarbonización debe sujetarse en acciones realizadas si se quieren preservar los recursos y promover la biodiversidad.
Para concluir, hay que señalar que existe un reconocimiento al esfuerzo que premia este compromiso y promueve su marca como sostenible y carbono neutral. Hay una serie de certificaciones que así lo ponen de manifiesto y que enumeramos en el siguiente listado.
- Carbon Neutral Certified. Esta certificación certifica que la empresa ha contabilizado y neutraliza sus emisiones contaminantes.
- Carbon Footprint. Este documento indica que la empresa se ha preocupado por cuantificar las emisiones de gases de efecto invernadero.
- Certificación del sello de carbono neutro organizacional. Este documento acredita que la empresa tiene como objetivo incentivar la reducción de gases contaminantes.
En resumen, para ser una empresa neutra en carbono se deben seguir estos tres pasos y cumplir con los objetivos indicados. Realmente, este cambio de mentalidad favorece e impulsa un modelo mucho más sostenible y beneficia a las nuevas generaciones. Puedes ver nuestra estrategia sobre la huella de carbono.
